sábado, 26 de mayo de 2012

DE BLUMBERG A CANTERO

En el campo de la relación comunicacional de los políticos con la opinión pública ante sucesos delicitivos conmocionantes, existen dos actitudes aparentemente opuestas pero que auguran un mismo resultado de impunidad: el silencio o “la foto”. Un hecho delictivo resulta conmocionante cuando transparenta la ausencia de políticas de seguridad cuando no complicidades manifiestas que posibilitan el delito primero, y aseguran su impunidad después.

Es lo que actualmente sucede con la casi quijotesca lucha de la nueva comisión directiva del club Independiente encabezada por Javier Cantero, para erradicar a las “Pymes” llamadas barras bravas enquistados en la institución, cumpliendo con un compromiso electoral que entre otros, les permitió lograr en diciembre pasado una amplia victoria sobre la lista oficialista que conformaron el senador de la provincia de Buenos Aires Alvarez de Olivera; el ex presidente de la Unión Industrial Lascurian; el nefasto anterior presidente Julio Comparada; el grupo sindical Moyano, y las militantes barras bravas.  Ante la verdadera repercusión que provocó el cumplimiento de la palabra por parte de un grupo de socios alejados hasta ese entonces de las estructuras de conducción, con las consecuentes amenazas de quienes hacen del delito un negocio, aparece la primera reacción política de manual: la foto. Es así como Javier Cantero aparece reunido con la Ministra de Defensa Nilda Garré; el Jefe de Gabinete Abal Medina; el Ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires Ricardo Casal, y su organismo dependiente Coprosede encabezado por Rubén Pérez; el presidente de la AFA Grondona, y otros tantos funcionarios. La oposición no se quedó atrás: Ricardo Alfonsín concurrió al estadio de Independiente para apoyar a Cantero, aclarando que si bien es de River, sus nietos son de Independiente. Todo ello debidamente registrado por cámaras fotográficas y televisivas, tratando de convencer a la sociedad que “estamos analizando seriamente la problemática”. Por el contrario, los barras no están para perder tiempo en análisis; amenazaron con la colocación de una bomba en el establecimiento educativo sustentado por el club, y amenazaron de muerte al vicepresidente Claudio Keblaitis, creando tal angustia familiar que lo obligó a renunciar en principio, para luego aceptar tomarse una licencia a solicitud de los integrantes de la comisión directiva. Hace escasos cuatro días, barras de Racing amenazaron con un arma al jugador de ese club Giovanni Moreno, cuando salían del entrenamiento. En este caso, los dirigentes no utilizaron el recurso de la foto, sino una frase también de manual para adormecer a la opinión pública: “llegaremos hasta las últimas consecuencias”.

Porqué preocupa el recurso político de “la foto”? Es indudable que las autoridades políticas, judiciales, policiales y deportivas no habrán pretendido informase de la trama delictiva y criminal de las barras bravas a través de Cantero, cuando en cada juzgado,  repartición policial i comisiones directivas se conocen sus nombres, apellidos y prontuario policial; su situación laboral, con las opciones del empleo en el club; en reparticiones públicas por nexos políticos o como “prestadores de servicios” facturados a los clubes; cuando existen filmaciones en donde claramente se los identifica actuando, y son públicos los consabidos sobreseimientos judiciales cuando son detenidos. Por lo tanto “la foto”, ante el indisimulable hartazgo popular, solo pretende hacer creer una vez más a la opinión pública que se actuará ante los delincuentes. Lo más grave es que cuando Keblaitis es amenazado de muerte, él y el resto de los ciudadanos saben que no son amenazas vanas. Los tiroteos con participación de barras teniendo como consecuencia muertos, muchas veces inocentes, ya es una noticia habitual. Y que no haya detenidos y juzgados por los crímenes también.

No es el único caso, desde luego. Hace poco más de un año una reacción similar de los socios de Newells Old Boys de Rosario en una elección consiguieron derrotar al nefasto presidente López. Era conocido el caso de una jueza de Rosario que liberaba en forma inmediata a los conocidos barras bravas cuando eran detenidos. Hoy también está intentando la lucha Estudiantes de La Plata. Pero es justo que se vuelque en las espaldas de la sociedad erradicar la delincuencia con los riesgos que ello implica, cuando es una tarea que compete a los ámbitos políticos y de seguridad?

Es necesario destacar que existió un apoyo útil, concreto, y además genuino porque hace a la esencia de su función: el que brindó el periodismo en general, y el deportivo en especial. Con conceptos rotundos que no fueron capaces de expresar políticos oficialistas y supuestos opositores. Más aún; el periodismo con sus cámaras, investigaciones y aportes de datos fehacientes, ofrece permanentemente elementos probatorios suficientes para que los fiscales  actúen de oficio.

A comienzos del año 2004 se produjo el secuestro y posterior asesinato de Axel Blumberg. Su padre encabezó una cruzada contra la delincuencia que concluyó en la marcha popular del 1º de abril de ese año con epicentro en la plaza frente al Congreso de la Nación, que contó con la concurrencia de más de 150.000 personas, al punto que se ocuparon todas las calles convergentes, y el tránsito por la avenida Callao debió interrumpirse a partir de la avenida Corrientes. La manifestación provocó tal conmoción, que las instancias políticas acudieron presurosas al recurso de “la foto”. Blumberg fue recibido por el presidente Kirchner, por integrantes de la Corte Suprema, por senadores y diputados nacionales. Posteriormente Blumberg y su equipo de trabajo presentaron varios proyectos de leyes modificando el Código Penal, que los legisladores sin mayor estudio, mientras miraban de reojo a las cámaras de televisión y a Blumberg que los observaba desde un palco lateral, aprobaron velozmente. Mientras tanto los servicios de inteligencia trabajaban a tiempo completo,  hasta que finalmente descubrieron que Blumberg había usurpado el título porque no era ingeniero, lo que políticamente es mucho mas grave que los enriquecimientos ilícitos con fondos públicos. El efecto Blumberg se diluyó en el transcurso del tiempo, y sin cámaras presentes, los legisladores tuvieron que dejar sin efecto las reformas aprobadas, varias de ellas bastante incoherentes.

Vale el recuerdo ante una duda basada en los antecedentes. Las autoridades actuarán definitivamente ante los delincuentes que ponen en riesgo la integridad física de los directivos de Independiente e hinchas de fútbol en general, o estarán abocadas en investigar si Cantero es evasor de la AFIP?


sábado, 12 de mayo de 2012

ESTATAL O PRIVADO: EJERCICIO ASTROLÓGICO

La astrología se dedica al estudio de los astros, en un contexto en donde conviven misticismo, cientificismo y creencias, intentando averiguar el destino de los seres humanos o predecir hechos futuros, quedando el libre albedrío limitado. Las recientes declaraciones de legisladores y funcionarios intentando justificar porque a dieciocho años de haber votado la privatización de YPF hoy lo hacen por su reestatización son tan superficiales, que nos lleva a pensar si no sería más razonable invocar circunstancias ajenas a su voluntad, tales como que en 1994 Urano estaba alineado con Plutón, mientras que en mayo del 2012 se produjo una extraña confluencia entre la Luna y el Sol, por lo que las votaciones en ambos casos estaban predestinadas y consecuentemente ajenas a su voluntad.

Sirva la ironía previo a reflexionar sobre las causales por las que transformaciones de ciento ochenta grados en políticas esenciales para el desarrollo de un país y sus habitantes, se produjeron en el corto plazo de no más de dos décadas, y con los mismos nombres y apellidos en los campos político, empresarial y gremial, lo que hace suponer “a priori” que en la toma de decisiones no existen consideraciones de carácter ideológico y/o partidario. El caso Repsol-YPF remite a recientes decisiones trascendentales como la modificación de la Carta Orgánica que define el rol y autonomía del Banco Central; la reestatización del sistema jubilatorio y la expropiación de Aerolíneas Argentinas. En todos los casos con una lamentable pasividad cuando no complicidad por parte de sectores supuestamente opositores. Este último aspecto merecerá reflexiones posteriores, porque dicha pasividad tiene causas concretas.

Lo más grave para los argentinos no es la falta de coherencia en el manejo de los intereses del Estado, sino por el contrario la existencia de una matriz perversa carente de objetivos nacionales que explica con claridad los sucesivos cambios en las políticas de Estado, que lamentablemente se acelerarán a futuro si exigencias del presupuesto nacional lo demandan. Este cuadro de situación explica además que la inexistencia de partidos políticos y alternativas de gobierno no es casual, y no por culpa del gobierno precisamente. La Presidenta en su discurso anunciando la expropiación de las acciones de Repsol brindó el dato clave y más trascendente que justificó la decisión tomada: “Repsol-YPF fue vaciada”. En un discurso posterior solicitó la colaboración de empresarios “que se llevaron plata a paladas”. En este último punto, si la plata a la que se refiere es del Estado, hay que mencionar también a los funcionarios públicos responsables.

El vaciamiento de Repsol-YPF repitió con exactitud lo sucedido con Aerolíneas Argentinas: 1) Ante urgencias presupuestarias, se vendieron o concesionaron las empresas a operadores internacionales no destacados en sus rubros, redistribuyendo políticamente los importantes recursos obtenidos por dichas operaciones. 2) Inicialmente el Estado establece límites al manejo de las empresas adjudicatarias (por ejemplo, la acción de oro en YPF, que impedía la venta mayoritaria a terceros sin aprobación expresa del Estado). 3) El Estado reserva parte del capital accionario e integra los Directorios, con participación gremial. 4) Pasado el momento de euforia inicial con la correspondiente propaganda política, años mas tarde se van cambiando paulatinamente las condiciones contractuales originales cediendo derechos favor de grupos privados, sin que éstos se quejen por la ausencia de “seguridad jurídica” ni exista fervor patriótico en los actores sociales progresistas (es interesante conocer como Repsol se hizo de la mayoría accionaria en 1999, sin objeciones públicas resonantes). Esta instancia alejada de exposición pública es un verdadero punto de inflexión, porque es el inicio de la futura debacle. 5) Comienza el proceso de vaciamiento que lleva años (distribución excesiva de utilidades; incumplimiento de inversiones; enajenación de activos físicos como sucedió en Aerolíneas; escandalosos pagos de coimas a funcionarios de gobierno y gremiales), todo ello con la total pasividad de los organismos de control público y poder político. 6) En determinado momento surgen nuevas dificultades presupuestarias en el Estado y déficits fiscales. 7) Se implementa la reestatización, denunciando “vaciamientos”, sin que se efectúen denuncias penales ni se intenten resarcimientos económicos a favor del Estado. 8) Retomadas las empresas el Estado debe volcar ingentes recursos presupuestarios hasta sanear todos los pasivos, y volver a comenzar con la rueda estatal-privado.

Esta matriz es de rigurosa aplicación en los casos mencionados, y lo serán inevitablemente en los futuros, muchos de ellos cercanos: empresas concesionarios de transporte ferroviario y terrestre; prestatarias de servicios eléctricos y concesionarias viales.  Formulemos una pregunta ingenua, más ejemplificadora que cualquier crítica de coyuntura. Si la Casa de la Moneda carece de la tecnología necesaria nada mas ni nada menos que para imprimir la moneda nacional, porqué no adquirió en subasta pública el equipamiento de la quebrada Ciccone Calcográfica, a la que recurre actualmente para la misma tarea, con una harto evidente intervención del Estado para su recuperación en manos de monotributistas con gran capital disponible y nuevos dueños extranjeros con antecedentes societarios desconocidos? La hipótesis es obvia: en la primera opción no hay negocio; en la segunda sí.

Pareciera que los liberales que claman por la seguridad jurídica y los progresistas por las reestatizaciones, en realidad conforman un reducido grupo de comunicadores políticos permanentes e interesados, ajenos a los liberales y progresistas que día a día deben dar pelea en el mundo real para alcanzar un nivel de vida digno.

sábado, 5 de mayo de 2012

CONFUSIÓN ENTRE IDEOLOGÍA Y OPORTUNIDAD



           CONFUSIÓN ENTRE IDEOLOGÍA Y OPORTUNIDAD (segunda parte)

En la última reflexión señalábamos la diferencia conceptual entre ideología y oportunidad para decidir la expropiación de las acciones de Repsol por parte del gobierno. Es habitual y lógico que toda medida trascendente sea acompañada de una fuerte propaganda pública de carácter masivo concentrada esencialmente en lo emocional, al estilo “recuperamos YPF para los argentinos”. Es entendible aunque no justificable que legisladores oficialistas apoyen a libro cerrado las medidas de quienes los ubicaron en lugares expectantes en las listas sábanas para alcanzar un cargo legislativo, ajeno en muchos casos a sus virtudes y capacidades.  Lo que de ningún modo puede aceptarse es que esa actitud la tengan quienes llegaron a legisladores  ofreciéndose a la sociedad como una alternativa política. No estamos hablando de “oponerse por oponerse”, que es tan nocivo como aprobar sin saber de que se trata, sino de su indelegable función de obtener información; analizarla; explicitar riesgos y proponer estrategias superadoras, para que el objetivo esencial de gobierno, en éste caso el de obtener la mayoría accionaria de Repsol-YPF para tener el control directo del recurso petrolero por el Estado, se cumpla de la mejor manera para los argentinos, visto la sinuosa y breve historia de privatizaciones y estatizaciones plagadas de corrupción. Las minorías (término más adecuado que oposiciones), son las que posibilitan que un sistema pueda llamarse democrático, y como tales deben siempre ser activas, jamás pasivas. De no ser así, invocar la condición de minoría puede ser un recurso para ocultar la complicidad.

Valga este introito para analizar la postura de radicales y socialistas con grupos afines en sus diversos formatos en la aprobación de la expropiación a Repsol, por expresar ambos movimientos históricos a miles de ciudadanos en distintas generaciones. Ante el desafío de una decisión política trascendente se embarcaron en análisis superficiales carentes de alternativas, tratando de protegerse tras las memorias de Mosconi, Yrigoyen y Alfredo Palacios. Buscaron apoyo en el pasado para no comprometerse con el futuro, renunciando a la obligación de brindar a la sociedad información clara y precisa de los alcances de la ley, intentando enriquecerla con propuestas superadoras aún cuando se pierda la votación en el recinto. Es el único modo de poder ser considerado una opción de gobierno por un sector de la sociedad. Decisiones como el uso de reservas del Banco Central y la expropiación de las acciones de Repsol, como nunca transparentaron la enorme distancia política, compartamos o no sus decisiones, que existe entre Cristina Kirchner y sus “opositores”. Ningún legislador, ya sea oficialista (entendible), u opositor (vergonzoso), planteó aspectos esenciales que mejoraran la ley que hacen al futuro de la empresa, que equivale a decir, al bienestar de los argentinos. Solo mencionaremos algunos de estos aspectos, que sería interesante conozcan los sanamente eufóricos hoy, para no convertirse en los “indignados” de mañana.

1) La presidenta justificó su decisión en el “vaciamiento” de la empresa, que sin dudas existió. Esto implica una acción premeditada y continua a lo largo de años, que incluye falseamiento de balances, sobrecostos facturados con empresas asociadas, enajenación de bienes a precio vil, etc. Vale decir, una defraudación prevista en el Código Penal. Sin embargo se aprueba la expropiación sin formular denuncia penal contra los funcionarios argentinos y extranjeros responsables, para ocultar la enorme corrupción que llevó a la actual situación, que hace que la eventual indemnización a Repsol pueda ser irrelevante en relación a las ganancias ilegitimas obtenidas por la empresa.
2) En la nueva condición de una YPF “que es de todos”, no se explica porque continuará siendo una Sociedad Anónima en lugar de una Sociedad del Estado, salvo que se desee sustraerla precisamente del control del Estado.
3) Una empresa “vaciada” exige toda una reestructuración técnica, financiera y comercial con un cronograma determinado, que dará beneficios solo de tener éxito. Ningún legislador informó cuál es el endeudamiento de Repsol-YPF, que el Estado absorberá en un 51 %, y cuál es su liquidez  (disponibilidad inmediata de fondos).
4) No se informó cuáles son las posibilidades y expectativas de extracción y procesamiento de petróleo en el corto y mediano plazo, en función de los relevamientos existentes e inversiones posibles para mejorar la relación autoabastecimiento - importación de combustibles
5) Se desconoce, aunque se supone, quién se hará cargo de los cientos de juicios pendientes que arrastra Repsol.
6) En el marco de la euforia “YPF es nuestra”, se desconoce que tipo de asociación y condiciones contractuales se hará con capitales chinos, americanos, franceses, ingleses y brasileños, que no repitan la triste experiencia vivida con los capitales españoles, considerando además que los responsables vernáculos siguen en funciones.

Estas preguntas representan mínimamente los múltiples interrogantes que se abren por desconocer la estrategia o plan de negocios que se seguirá con YPF, y que ningún legislador supuestamente opositor cumplió con su obligación de averiguar e informar.
Hablamos de radicales y socialistas; pero es justo no comprometer con la actual mediocridad a los miles de ciudadanos que lo fueron y lo son en la rica historia democrática de dichos movimientos. Por lo que hay que señalar con nombre y apellido a los principales responsables hoy: Ricardo Alfonsín; Gerardo Morales; Ernesto Sanz; Oscar Aguad; Ricardo Gil Lavedra, entre los radicales. Rubén Giustiniani, y sectores asociados como Claudio Lozano; Margarita Stolbizer y Victoria Donda por el complaciente autodenominado “progresismo”. El espíritu de liviandad con que manejaron el tema quedó refñejada en su verdadera dimensión en el artículo que publicó en La Nación el pasado 22 de abril el ex candidato presidencial Hermes Binner, que expresa textualmente en uno de sus párrafos: “Debemos estudiar que modelo estatal gestionará a la nueva YPF. Esta gestión del Estado debe ser eficaz, eficiente y transparente para no dilapidar más los dineros de las y los argentinos”. Cuántos años mas la sociedad deberá pagarle a los mismos legisladores cuantiosas dietas para que nunca tengan estudiados “los modelos estatales” que hacen a una política de gobierno? La carencia de propuestas concretas de quien pretendió ser presidente de la Nación hace pocos meses, exhibe con crudeza la mediocridad política “opositora”. Se cita la fecha de la publicación para a quien le interese leer el artículo en su totalidad,  para verificar que maliciosamente no se transcribió una frase de la nota fuera del contexto.

Tampoco el PRO, que se expresó negativamente por la estatización parcial de YPF,  clarificó el debate. Sustentó su rechazo en aspectos loables pero no acordes a la realidad. Los opositores suelen hacer hincapié en la seguridad jurídica, pero ocultan que su inexistencia es más perjudicial para los que viven en el país que para los inversores extranjeros, porque vulnerar las leyes es un atributo de los poderosos, no de los débiles; recordemos sin ir mas lejos la incautación de los ahorros de la clase media en el 2001, o la pesificación asimétrica en favor de los grandes grupos empresarios meses mas tarde. Tampoco es cierto que un país sin seguridad jurídica no atrae inversiones externas; por el contrario es un enorme atractivo para los capitales especulativos en negocios de corto plazo, maximizando utilidades con la cobertura de funcionarios públicos y empresarios nacionales asociados mediante el pago de coimas. Recordemos dos casos recientes: Aerolíneas Argentinas vaciada por Marsans, que no era empresa de aeronavegación sino de turismo; e YPF con Repsol, que era más financiera que petrolera. No es casual que los directivos de la Unión Industrial Argentina no se hayan expresado respecto a la expropiación ni por la seguridad jurídica. Muchos de sus integrantes ya se están moviendo fuertemente  para actuar como nexo entre el Gobierno y petroleras chinas, americanas, inglesas y francesas para lograr “el autoabastecimiento”. Recordando la famosa frase de Brufau al presentar la incorporación de Esquenazi a la empresa…se proclaman ”especialistas en mercados regulados”.

No fué menos lamentable la actitud de los gobernadores de provincias petroleras, que por si existía alguna duda, blanquearon la inexistencia del declamado federalismo. Ante la decisión de la presidenta de actuar sobre el paquete accionario de Repsol, cual niños en el llamado a recreo, se atropellaron en la puerta del aula para mostrar quien era mas rápido en quitarle concesiones de Repsol, que paradójicamente ellos debían controlar. En perjuicio de sus provincias, desconocen cual será el manejo concreto que tendrán dentro de la nacionalización, y mas grave aún, cuál será el impacto en las regalías que perciben. Por de pronto con la intervención directa del Estado Nacional, es de suponer que no mantendrán la autonomía actual, porque no sería lógico la independencia de estados provinciales débiles negociando con grupos petroleros fuertes, que dió lugar a prórrogas de concesiones nocivas a los intereses provinciales. Quien mejor lo describe es el ex gobernador de Santa Cruz, Sergio Acevedo: “Cuando Chubut prorrogó Cerro Dragón a la empresa de Bulgheroni y British Petroleum, señalé que afectaba el interés nacional. Por suerte la frustrada venta de la concesión a una sociedad china sin que el gobierno provincial se preocupara, fue una demostración del poco control que hay sobre la explotación de un recurso estratégico”.

Es de esperar que la Presidenta de la Nación, consciente de la ausencia de aportes concretos que le pueda brindar supuestas oposiciones, con entornos obsecuentes y empresarios siempre listos, adopte las mejores decisiones. Y por ser también de interés nacional, brinde algún apoyo para lograr una oposición seria y coherente.