En el análisis de similitudes y diferencias entre el
período 2001/02 y el actual, tratamos en la última reflexión el contexto político.
Para incursionar en lo económico, es necesario establecer indicadores relevantes,
con valores estadísticos comparables a lo largo del tiempo, para luego
interrelacionarlos y proyectar evoluciones futuras. Para ello se adoptaron
datos oficiales, según los Organismos específicos, hasta el 2013 inclusive. Se
incluye al INDEC, pese a la adulteración de datos estadísticos a partir de su intervención
en el 2007.
Entre la multiplicidad de factores que origina una
crisis terminal, dos son inevitables: pésimas conducciones políticas y alta
corrupción. En el caso de nuestro país, desde hace décadas se sigue un mismo
patrón: el Estado no genera riqueza para luego gastar y/o invertir, sino
consume riqueza hasta límites de insolvencia, para luego reconstituir la caja
estatal bajo el paraguas de emergencias económicas. Los recursos para volver a
recaudar tampoco son novedosos: morosidad con los acreedores; confiscación de
depósitos a pequeños y medianos ahorristas; congelamiento de salarios;
privatizaciones y/o estatizaciones de las cajas de jubilaciones y empresas
estatales. Bajo falsos debates ideológicos, se intenta disimular los objetivos:
recuperar recursos públicos y seguir gastando irresponsablemente, con
enriquecimientos desmedidos de funcionarios y empresarios.
Lo más preocupante de la crisis actual, aún
dificultosamente manejable, es el discurso público de los por ahora
oficialistas y supuestos opositores, coincidente en plantear que la ciudadanía
tendrá que esperar 14 meses, hasta
diciembre del 2015, ya sea para perseverar en el “modelo” o para modificarlo. Aclaran,
temerosos, que la crisis actual “nada tiene que ver con el 2001”. La afirmación
es intencionadamente falaz; si no se toman decisiones de corto plazo que
modifiquen el rumbo económico-social, se replicará a fines del 2015 la estrategia de concordancia
política para aplicar un feroz ajuste en “nombre de la salvación nacional”, utilizada
en el 2002. Y para que no quepan dudas, con las mismas dirigencias,
beneficiarios y víctimas de ese entonces.
Vayamos a los números. En un intento de enriquecer los
reiterativos debates económicos, y a modo de mojón de partida para encarrilarlos
y pasar de los diagnósticos a las propuestas, se propone un marco referencial con
los siguientes indicadores económicos e hitos políticos claves:
INDICADORES ECONÓMICOS: 1)
Deuda externa; 2)
Reservas Banco Central; 3) Tipo de cambio ($/U$S); 4) Precios al
Consumidor (inflación); 5) Tasa de desempleo.
HITOS POLÍTICOS: 1) diciembre
1999 (vence mandato de Menem); 2) diciembre 2001 (renuncia De la Rúa); 3) diciembre
2002 (asume Duhalde en enero); 4) diciembre 2003 (asume Kirchner en mayo); 5) diciembre
2014 (estimado).
Al respecto se elaboró un cuadro, inserto al pié, que visualizado
en su globalidad y no en comparaciones interesadamente parcializadas, puede exhibir
sorpresas. Por ejemplo, relacionar deuda externa y reservas del Banco Central en
diciembre 2009 contra diciembre 2013. O ver el impacto que tuvo en tan solo dos
años, entre 1999 y 2001, la pérdida de
8.000 millones de dólares de reservas y el incremento del desempleo en 4,5%. Las
recurrentes crisis en nuestro país, a partir de la célebre frase “hay que pasar
el invierno”, pronunciada en 1962 por el Ministro de Economía Alvaro Alsogaray,
tiene matices distintivos según la época: el que apuesta al dólar pierde; los
depósitos de los argentinos son intangibles; los buitres nos atacan. Donde no
hubo ni habrá matices diferenciales, lamentablemente, será en las soluciones:
las ganancias se concentran y las pérdidas se diversifican. Y para la
corrupción, garantismo. Observar el cuadro, e imaginar conclusiones.
Año
|
Deuda
externa (u$s)
|
Reservas
Banco Central (u$s)
|
Tipo
de cambio u$s x $
|
Precios
consumidor (inflación)
|
Desempleo
|
Diciembre 1999 (cierre ciclo Menem)
|
145.289
|
27.831
|
1,00
|
-1,8
|
13,8
|
Diciembre 2001 (cae De la Rúa)
|
166.272
|
19.425
|
1,00
|
-1,5
|
18,3
|
Diciembre 2002 (en enero asumió
Duhalde)
|
156.748
|
10.485
|
3,09
|
41
|
17,8
|
Diciembre 2003 (en mayo asumió
Kirchner)
|
164.645
|
14.119
|
3,00
|
3,7
|
17,3
|
Diciembre 2013 (gestión Cristina
Kirchner)
|
137.613
|
30.529
|
5,46
|
10,8
|
7,1
|
Diciembre 2014 (estimado)
|
sin
datos serios
|
25.500
|
9,10
|
30
|
10
|
Fuente hasta diciembre 2013: Ministerio de Relaciones
Exteriores de la República Argentina
Para concluir con esta secuencia 2001-2002-2013, e ir
avizorando nuestro destino en las postrimerías del 2015 y comienzo del 2016, en
la próxima reflexión recordaremos parcialmente quiénes ganaron y quienes
perdieron en la crisis 2001-2002. El método aplicado no fue neoliberal y/o
nacional-popular, sino genérico. Se llama clase dirigente argentina.